Editorial de La Jornada; «Venezuela: crisis e injerencia».
…(…)…En el delicado momento presente todos los gobiernos de la región debieran acatar escrupulosamente el principio de no intervención y permitir que los venezolanos resuelvan por sí mismos sus diferendos políticos e institucionales. La injerencia de gobiernos extranjeros y organismos internacionales –especialmente la OEA, cuya tendencia histórica a aplicar los dictados de Washington para todo el continente es de sobra conocida– sólo complica y agrava la crisis por la que atraviesa Venezuela. Ésta debe resolverse, en cambio, mediante el diálogo entre las partes, en el pleno ejercicio de la soberanía nacional y en la observancia de los principios democráticos fundamentales.